A menudo cuando restauramos algún elemento metálico oxidado podemos encontrarnos con que tiene muchos espacios inaccesibles para la lija de grano grueso. Quizás nos interese en ese caso buscar tratar estas piezas con un chorro de arena en Vallés Occidental, ya que esta técnica permite mucha mayor maniobrabilidad sin dañar la pieza.
Esta técnica, que suele ser más conocida por sus aplicaciones para limpiar fachadas, es además un decapante muy efectivo, en especial en superficies con muchos recovecos por donde una lijadora no podría acceder. Mediante la expulsión de arena de sílice de diferentes grosores en función del resultado que queramos lograr, podemos eliminar los restos de pintura y óxido de una superficie.
Al contrario de lo que puede parecer, una técnica como la del chorro de arena en Vallés Occidental respeta al máximo la pieza original, llegando a ser capaz de retirar el recubrimiento de un vidrio sin dañarlo. En superficies metálicas el resultado es inmejorable, por lo que es bastante común su empleo en la industria del automóvil a la hora de realizar trabajos de chapa y pintura. También es ideal para restaurar todo tipo de herramientas, mobiliario, maquinaria, etc., porque funciona muy bien con objetos formados por piezas desmontables.
Deberemos tener cuidado, ya que tras un tratamiento con esta técnica, en especial si la zona presentaba partes oxidadas, nuestro objeto a restaurar ya no tendrá la capa protectora que le proporcionaba la anterior pintura, aunque fuera de forma parcial. Como quedará expuesto a los elementos hasta que le volvamos a aplicar un nuevo recubrimiento, es aconsejable que lo hagamos inmediatamente después.
Como has podido ver, esta técnica presenta muchas ventajas, pero ha de ser realizada por profesionales cualificados equipados con la protección adecuada, como es nuestro caso en Granallats Industrials Polinyà, donde realizamos todo tipo de limpieza mediante chorro de arena.